¿Cuál es la mejor marca de guitarra acústica del mercado?
¿Martin, Gibson o Taylor?
Algunos sostienen que existen tres marcas que, más que ninguna otra, han establecido el estándar con el que se comparan todas las guitarras acústicas: Martin, Gibson y Taylor. Y como esto es internet, aquí estamos para preguntar: ¿Cuál de las tres es la mejor?
¿Inspira la D-28 un auténtico “temor” (dread-nought) en sus rivales? ¿La Hummingbird se impone con su “martillo” de sonido? ¿O la 814 despacha a esos viejos pesos pesados? Analicemos algunos modelos icónicos y veamos si podemos hacernos una idea de cuál ganaría en un hipotético “combate” de cuerdas de acero entre Martin, Gibson y Taylor.
Guitarras acústicas Martin
Fundada en 1833, Martin lleva casi 200 años fabricando guitarras acústicas de gran calidad. ¡200 años! Si lo miramos en términos guitarrísticos, esa experiencia se compara, en cierto sentido, con la de Stradivarius en el mundo de los instrumentos de cuerda frotada.
Las guitarras Martin han sido tocadas por algunos de los artistas más influyentes de la historia, como Bob Dylan, Neil Young o Tony Rice. Su enorme presencia en la música y su larguísimo recorrido han hecho que el sonido Martin sea parte esencial de géneros como rock, folk, country y bluegrass.
Martin ofrece una gran variedad de modelos que se adaptan a diversas necesidades, pero suelen ser especialmente populares entre quienes hacen strumming y flatpicking, dada la claridad y proyección que brindan para tocar líneas solistas. Muchos fans de Martin destacan ese “punch” característico como uno de sus grandes atractivos.

Modelos populares de Martin
Dada su trayectoria de casi dos siglos, sería imposible abarcar aquí todo su catálogo. Sin embargo, a modo de pincelada, estos son tres de sus modelos más amados:
Martin D-28
Para muchos, la Martin por excelencia. La D-28 es una de las guitarras más icónicas de la música, tocada por Hank Williams, The Beatles y un sinfín de artistas más. Con tapa de abeto y aros y fondo de palisandro de la India, sus graves son profundos, sus agudos “campaneantes” y su volumen puede proyectarse “como un cañón”.
Martin D-18
La “hermana” de la D-28, pensada en su origen para reducir costos cambiando el palisandro por caoba y prescindiendo de adornos como el binding de espiga (herringbone). Más allá de su precio, la D-18 tiene una voz única: esa mezcla entre caoba y abeto, con un varetaje interno distinto al de la D-28, da lugar a un sonido más directo y con menos matices en los armónicos. Es muy apreciada en el bluegrass, tanto por su apariencia más sencilla como por su tono “sin florituras”.
Martin 000-18
Otra Martin muy venerada, pero de cuerpo más pequeño que un dreadnought. Con tapa de abeto y fondo y aros de caoba, la 000-18 conserva el carácter puro de las Martin de mayor tamaño, pero en una silueta menos voluminosa. Su sonoridad es algo más suave y equilibrada; quizás no tan potente como un dreadnought, pero perfecta para fingerpicking y para quienes buscan un instrumento más manejable.
Guitarras acústicas Gibson
A diferencia de Martin, que se ha dedicado casi en exclusiva a las guitarras acústicas, Gibson presume de una gran fama también con sus modelos eléctricos (como la Les Paul). Sin embargo, aunque no tenga la historia tan larga como Martin, Gibson fabrica acústicas excepcionales desde 1894, y son muchos los guitarristas que respaldan su lema: “Only a Gibson is Good Enough”.
Figuras como Gillian Welch, The Everly Brothers o Keith Richards han utilizado acústicas Gibson con resultados memorables. En general, las acústicas de Gibson se caracterizan por su habilidad para manejar el acompañamiento rítmico. Algunos describen el sonido Gibson como algo más “comprimido”, con medios ligeramente recortados, ideal para cantautores que buscan apoyar su voz con acordes bien definidos.
Modelos populares de Gibson
Al igual que pasa con Martin, Gibson tiene un catálogo inmenso y cada modelo podría ser la favorita de algún guitarrista. Con disculpas anticipadas a quienes aman la J-45, veamos tres guitarras emblemáticas de la familia Gibson:
Gibson Hummingbird
Si bien existen modelos más pequeños en la historia de Gibson, para muchos la palabra “Gibson acústica” evoca cuerpos grandes. La Hummingbird cumple esta idea a la perfección: una dreadnought icónica presentada en 1960, muy popular desde entonces. Fabricada con tapa de abeto y aros y fondo de caoba (similar a la fórmula de la D-18), la Hummingbird brinda un sonido muy lleno, ideal para cantautores.
Además, destaca por su aspecto inconfundible: el pickguard grande y adornado, los inlays en bloque y los acabados que suelen incluir bursts. Todo en ella es una declaración de estilo que contrasta con la sobriedad que Martin suele exhibir.
Gibson SJ-200
Conocida como la “King of the Flat-Tops”, la SJ-200 es una guitarra tan distintiva que no solo destaca en el catálogo de Gibson, sino dentro de todo el mundo de las acústicas. Su cuerpo “super jumbo” suele estar hecho de arce flameado o palisandro, con tapa de abeto. Y su estética, con el Mustache bridge y otros ornamentos, roza el barroco.
A pesar de su enorme tamaño, la SJ-200 no es necesariamente un “boom” solo de graves; de hecho, ofrece un equilibrio notable y una respuesta muy matizada para interpretación detallada. Sin embargo, se luce especialmente al rasguear acordes.
Gibson Southern Jumbo
La Southern Jumbo (o SJ) es otra “jumbo” de tamaño considerable, con menos florituras que la Hummingbird o la SJ-200, pero igual de potente. Con un cuerpo muy cercano en diseño al de la famosa J-45, ofrece unos medios muy presentes y una gran versatilidad, siendo apta tanto para flatpicking como para fingerpicking. Muchos la aprecian por su resonancia cálida y su carácter “con alma” (mojo) inconfundible.
Guitarras acústicas Taylor
En un debate sobre Martin, Gibson y Taylor, esta última no puede presumir de la misma longevidad, pero sí de haberse convertido en el estándar de la guitarra acústica “moderna” desde 1974. En lugar de basarse en la tradición centenaria, Taylor ha apostado por la innovación, la calidad y la comodidad en la ejecución, ganándose fieles seguidores.
Taylor ha seducido a artistas de la talla de Neil Young, Dave Matthews o James Taylor, entre otros. Muchas de sus guitarras llaman la atención por su construcción con maderas exóticas, sus diseños de caja distintivos y su enfoque en detalles como los recortes (cutaways) y la ubicación de la boca, todo pensado para un mejor rendimiento sonoro y mayor facilidad de ejecución.
Modelos populares de Taylor
Los modelos icónicos de Taylor quizás no tengan décadas y décadas de historia como Martin o Gibson, pero la marca cuenta con creaciones que pueden competir de tú a tú con las mejores. Por su enfoque en la innovación, vemos con frecuencia acabados modernos y soluciones poco habituales en las Taylor, consiguiendo una estética y una respuesta tonal únicas.
Taylor 814
La 814 es uno de los modelos insignia de Taylor, un auténtico tope de gama con una enorme riqueza sonora. Al igual que muchas acústicas clásicas, combina abeto en la tapa con palisandro en aros y fondo. Pero su gran distintivo es la forma de cuerpo “Grand Auditorium”, con la que se logra un sonido amplio y vibrante, adaptable tanto a volúmenes altos como a pasajes más sutiles.
Taylor 818
La 818 es otra estrella del catálogo de Taylor. Presenta un cuerpo aún mayor, el llamado “Grand Orchestra”, que supera al Grand Auditorium. Con tapa de abeto y palisandro en aros y fondo, la 818 obtiene un sonido grande y cálido, sumamente poderoso, pero mantiene un brillo y una calidez que la hace también muy querida por los guitarristas de fingerstyle.
Taylor 612
Dentro de la variedad Taylor, la 612 es un modelo muy apreciado, tanto por su sonido como por su aspecto inusual. En su configuración estándar, ofrece aros y fondo de arce con tapa de abeto. Su silueta “Grand Concert” es similar a las 000 de Martin: un cuerpo más pequeño, ideal para quienes prefieren una sensación más compacta.
Tonalmente, la 612 se centra más en los medios, con agudos claros y graves dulces. Es fantástica para fingerpicking y para grabaciones donde se busca claridad y definición sin un exceso de volumen.
¿Y la guitarra acústica ganadora es…?
Si nos preguntamos quién gana el duelo entre Martin, Gibson y Taylor, la respuesta es: La que mejor encaja contigo.
Aunque suene a “respuesta fácil”, lo cierto es que la elección de una acústica es extremadamente personal. Lo bueno es que, gracias a Martin, Gibson y Taylor —y a la gran cantidad de marcas que se han inspirado en ellas—, existe un instrumento perfecto para cada guitarrista.
En Stringjoy (o la marca que seas) estamos muy orgullosos de ofrecer cuerdas que realzan la voz y la tocabilidad de cualquier acústica, y creemos que lo principal es que cada músico explore, pruebe y decida por sí mismo cuál es su favorita. Así que, adelante: sal, toca todas las guitarras que puedas y cuéntanos luego cuál consideras que reina sobre las demás.